Por Ismael Reyes
Presidente del Partido Demócrata Institucional (PDI)
El grado de criminalidad que exhibe hoy la República Dominicana, es exactamente proporcional al nivel de irresponsabilidad que exhiben quienes nos gobiernan.
El grupo que hoy manda en el país, es decir, los muchachos que decían que la sociedad dominicana se dividía entre los corruptos e irresponsable y los peledeístas, nos están dejando ver cuan falsa eran sus palabras, pues en los hechos y en sus manos, están permitiendo prácticamente la disolución de la fe en su pueblo, que siempre hemos tenido los dominicanos.
Cada día, ve uno más SE VENDE, en casas y apartamentos de la llamada “clase media”, porque quien puede, quien tiene una visa o la puede conseguir, lo que está haciendo es planes para abandonar su país, el país que le vio nacer, estudiar, crecer y desarrollarse, porque ya no le garantiza presente ni porvenir.
El que tiene posibilidades, no quiere que sus hijos se queden hoy en la Republica Dominicana. Quiere que se vayan fuera. Quieren que tengan futuro, el futuro que el país hoy le niega a un 25% de la población que tiene que irse al exilio voluntario, para intentar palear la frustración que sienten hoy de su país.
Es obvio, que nuestro País no puede seguir así. Este estado de deterioro tenemos que pararlo. Hay que sacar del poder, a quienes han tomado las arcas del estado para enriquecerse ellos, sus esposas, sus queridas, sus primos y sus hijos.
Hay que sacar a los PERFUMOSOS del Palacio Nacional, con el Presidente Leonel Antonio Fernández Reyna a la cabeza. No podemos seguir permitiendo más helicópteros, yipetas y carros de lujo, a expensa de la pobreza de nuestro pueblo, cuyos impuestos pagados le son robados por funcionarios convertidos en malhechores.
Mo más mansiones en las montañas compradas con los dineros robados al pueblo. No mas residencias campestre en las lomas del mogote, poseídas por gente que antes de ser funcionario del Gobierno del Presidente Fernández, hace 7 u 8 años, andaban de a pies.
No más casas lujosas en las playas, ni en los centros vacacionales, compradas con dineros provenientes de la alta corrupción que exhiben los altos funcionarios de este gobierno.
No más viajes al extranjero en compañía de lambiscones, cuyos gastos los paga el pueblo a través de los altos impuestos que hoy nos cobran, tal y como es el caso de la gasolina, que por cada galón que el pueblo compra, $75.00 pesos corresponden a impuestos que cobra el gobierno, para dilapidarlo sin control y de forma irresponsable.
Mientras el País se derrumba, los funcionarios del gobierno viven de espalda al pueblo. Basta tomar en las manos un periódico, -uno cualquiera de los que se editan en el país -, no importa el día de la semana que discurre, es encontrarse con la noticia de asesinatos, robos, asaltos, decomiso de grandes cantidades de drogas, caos en el tránsito, aumento de la gasolina, el gasoil, el gas propano, el servicio de energía eléctrica, el alquiler de la casa, los intereses bancarios, la varilla, el cemento, la arena, la pintura, el arroz, las habichuelas, la salsa de tomate, los plátanos, la yuca, el pan, el chocolate, el azúcar, y así, interminablemente. Es como si nos hubiesen caído encima, las 7 plagas de Egipto.
Es por ello, que el pueblo tiene que despertar, tiene que ponerse de pies, tiene que decirle, ¡BASTA YA a los PERFUMOSOS, a los que integran el gobierno más corrupto que ha tenido la República Dominicana en toda su historia, al gobierno de LEONEL FERNÁNDEZ.
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