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Al final, cuando se realice el recuento de esta extraordinaria Serie Mundial, las ilusiones de los Rangers de Texas murieron en el Juego 6 cuando estuvieron a un strike -en dos ocasiones- de quedarse con el título de las Grandes Ligas.
Los Rangers tuvieron el viernes por la noche otra oportunidad para recuperarse de esa devastadora derrota, pero no pudieron estar tan cerca en el último y decisivo juego de la Serie y cayeron por pizarra de 6-2 ante los nuevos campeones St. Louis Cardinals.
Los Cardinals se llevaron la Serie Mundial 4-3.
En un principio, los Rangers no mostraron indicios en este Juego 7 de tener malos recuerdos de la noche anterior.
Enfrentándose al lanzador Chris Carpenter quien lanzó con tres días de descanso, Ian Kinsler inició con un sencillo pero después fue atrapado demasiado lejos de la almohadilla de primera.
Elvis Andrus recibió base por bolas, y Josh Hamilton y Michael Young le siguieron con dobles consecutivos que produjeron una ventaja de dos carreras.
Matt Harrison tomó la lomita de lanzamientos para los Rangers, pero con dos outs, dio base por bolas a Albert Pujols y Lance Berkman. Eso trajo al héroe del Juego 6 David Freese, quien conectó un doble al jardín izquierdo que limpió las bases y empató el marcador 2-2.
En la tercera, Harrison cedió un jonrón solitario a Allen Craig para poner el marcador 3-2 y una ventaja que los Cardinals jamás rindieron en todo el partido.
Las cosas empeoraron para los Rangers: Los lanzadores Scott Feldman primero, y C.J. Wilson después, regalaron un par de carreras con las bases llenas, y con otra carrera en la séptima al relevista Mike Adams, los Cardinals tenían su título en las manos.
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