EDITORIAL
La destitución del general de la Policía Nacional Miguel Raúl de la Cruz Reyna constituye un ejercicio de poca responsabilidad, en que incurre el Poder Ejecutivo al no accionar con políticas claras en las instituciones oficiales.
Sin lugar a dudas, que merece la condena de todo el pueblo dominicano, el comportamiento exhibido por un grupo de uniformados, que se constituyeron en una especie de banda armada y procedieron a desconocer decisiones del ministerio público de San Francisco de Macorís, llegando al extremo de liberar a un compañero a quien se le había aplicado medidas de coerción ,al ser acusado por la comisión de un crimen contra un ciudadano.
.
Deploramos también las declaraciones emitidas por el general de la Cruz Reyna, quien , justificó el comportamiento de los subalternos bajo su dependencia. No actuó correctamente el general Miguel Raúl de la Cruz Reyna. Sin embargo , desde hace muchos años, el cuerpo del orden arrastra un mal sistémico que el Poder Ejecutivo y Legislativo no han querido enfrentar.
La Policía Nacional actúa como entiende es correcto. El Ejecutivo respalda su forma de accionar. Está tan satisfecho el presidente Fernández con esta conducta, que mantiene en sus cargos a los jefes policiales por sécula seculorum.
En cambio la sociedad dominicana no se identifica con muchas de las actuaciones de la institución encargada de velar por el orden público. Diferentes sectores han exigido durante décadas una profunda reforma. El presidente Fernández nunca ha cuestionado el comportamiento policial.
El general de la Cruz Reyna actuó en el conflicto de San Francisco de Macorís, como se le enseñó y aprendió en la institución. Su actuación fue conforme al comportamiento usual de la Policía Nacional. Sencillamente defendió, como se hace de manera usual en el cuerpo de orden, a los hombres asignados bajo su mando. No es propósito de este trabajo enjuiciar esta conducta.
Un primer comunicado de la misma Jefatura de la Policía Nacional, momentos después de presentarse la llamada "insubordinación de San Francisco de Macorís", fue para justificar la acción de los uniformados. Así es que la Policía Nacional actúa y así se comportó el general de la Cruz Reyna.
Solucionar este conflicto, separando al general de la de la Policía, dando fin a su carrera policial de un plumazo , no constituye un acto de justicia , tampoco de responsabilidad.
Se le aplicó la pena máxima al general De la Cruz Reyna. No tuvo derecho a su defensa. Fue condenado por sus mismos compañeros, quienes paradójicamente podrían correr la misma suerte, cuando se le presente un problema individual a cada uno de ellos. Sin embargo el mal es sistémico y no ha sido creado por la misma uniformada.
Son los actores civiles, y especialmente aquellos, que por los altos cargos que ostentan y nadie quierenmencionar, los que han posibilitado que situaciones como estas ocurran en esa institución.
No es una buena señal, la que se le envía con actitudes como estas, a la sociedad y en especial a las nuevas generaciones..
Escribir comentario
aquilino baez (sábado, 21 julio 2012 00:45)
Estimado Amigo...
Leido hoy su editorial, veo que el mismo carece de la verdad, en muchas precisiones formuladas. Ha sido debidamente aclarado que el Gral. Reyna No ordenò y mucho menos justificò la acción de los policìas aquel jueves 5, en San Francisco de Macorìs. Lo que si pasò, que sectores de MUCHO PODER, editaron el video que fue enviado por ellos mismos a los medios naciones e internacionales. Si gusta, le puedo hacer llegar el video completo, donde el general Reyna afirma que no justificaba dichas acciones porque "soy un hombre de ley", y donde dice además que desconocìa la acción, que de haberla conocido, con una simple llamada lograba regular la situación del preso. Si ud. quiere saber la verdad de todo esa trama, averigue donde está la parcela 727 DC 20, que aparentemente ha sido desaparecida en perjuicio de humildes familias de esa zona. Esos que por arte de magia desaparecieron esa parcela, también quieren desaparecer la carrera de ese joven oficial. Averigue donde está esa parcela y encontrará la verdad de esta trama.