EDITORIAL
La legítima preocupación del procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, en el sentido de que se necesita una Policía Nacional más ética ,es totalmente entendible y valedera.
Sostiene el doctor Domínguez Brito, que no se puede permitir, un cuerpo policial que altere las pruebas en el lugar donde se comete un crimen.
Afirma también el procurador general de la República que resulta totalmente inaceptable, un cuerpo de orden, que torture con una plancha a un detenido ,o le pegue un tiro en las piernas a un imputado, para sacar una confesión
Lo que dijo el Jefe del Ministerio Público no tiene desperdicio, Nadie ,absolutamente nadie, puede negar que acontecimientos como los denunciados por el procurador general de la República ,no estén ocurriendo en el país.
Un gobierno y un presidente que se respeten, no pueden permitir que actos salvajes como esto ocurran sucedan en una nación como la República Dominicana , que pregona el respeto a los derechos humanos.
Escribir comentario