Editorial
Ha provocado un gran impacto en la opinión pública la información de que un 79% de aspirantes a profesores de diferentes universidades ,no pudieron pasar las pruebas que los habilitarían para ingresar al sistema educativo nacional como docentes.
Es preciso aclarar que estos aspirantes no eran profesores en servicio, ni necesariamente habían cursado la carrera de pedagogía en las diferentes universidades nacionales.
Se trata de una variada gama de profesionales egresados de las academias de estudios superiores de diferentes áreas: médicos, abogados, ingenieros, químicos, estadígrafos, etc.
La reprobación de estos profesionales es solo una muestra de la deficiencia académica de los profesionales que egresan de nuestras universidades, sin importar el área.
Es una señal de que es mucho lo que nos falta por hacer.
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