ya olvidamos cuando un grupo de adolescentes en pleno plantel escolar violaron una enajenada mental introduciéndole un palo por su vagina.
EDITORIAL
Ahora todos estamos alarmados con la golpiza criminal que dieron un grupo de niños a una compañera de estudios que le provocó la muerte en la Romana.
La misma alarma se produjo cuando todos vimos un video donde una profesora y una agente policial estimulaban supuestamente la pelea entre niños.
Nos alarmamos todos cuando vimos otro video donde una adolescente le practicaba sexo oral a otro alumno en un reconocido colegio del municipio Santo Domingo Este.
Grave es también el hecho de que un estudiante de un colegio privado desnucara a un compañero de un sillazo.
Y seguro que ya olvidamos cuando un grupo de adolescentes en pleno plantel escolar violaron una enajenada mental introduciéndole un palo por su vagina.
Eso es solo lo que sale en los periódicos.
En cambio nadie se alarma cuando nos repiten hasta la saciedad que el problema de la educación se reduce a la jornada extendida y al almuerzo escolar.
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